No voy a criticar tampoco su labor, ya que pienso que el dinero al final acaba mal influyendo al político, bueno no exactamente así, quizás ya vengan mal influidos de antes. Pertenezco a un partido político y puedo decir que da mucho la impresión de que para llegar lejos en esto de la política eso de tener principios propios y convencimientos de la ideología que representes al final no sirve para nada, que lo que sirve es ser primero el que lleves el café al jefe y poco a poco hacer favores vendiéndote ideológicamente,siendo sumiso a ordenes hasta llegar a ser tu el jefe, es decir que para llegar a ser presidente del Gobierno Español o Secretario General de un partido hay que ser una especie de marioneta y decir lo que algunos quieren escuchar, y que curioso que esos "algunos" parecen que son esos que terminan por vivir de PM en tiempo de crisis y de no crisis mientras los ciudadanos de a pie luchamos para no pasar hambre a fin de mes, por tanto el político al final es un títere que ni siente ni padece y recibe "hostias" de todos lados, es algo parecido a un peón en una partida de ajedrez, el verdadero "malo" de la película no se ve porque este es nuestro País y las cosas funcionan así y repito que es mi opinión ojalá que esté equivocado.
